SANTIRSO, Manuel: “El
liberalismo: una herencia disputada”. Edit. Cátedra. Col. La Historia de ….
Madrid, 2014
Este libro trata de acercarnos al
liberalismo y a cómo se ha entendido en distintas épocas de su historia. Hace
un análisis de la teoría y práctica del liberalismo desde su formación (de la
segunda mitad del XVII a comienzos del XIX) hasta la actualidad (ahora precedido
de neo) pasando por sus etapas clásicas del siglo XIX: una primera
revolucionaria seguida de otra conservadora.
Tras una introducción, la primera
parte del libro trata de la formación del liberalismo (1689-1810). En ella
se analizan las aportaciones de la revolución inglesa del s. XVII
(especialmente la Declaración de Derechos de 1689, que aún hoy es una de las
bases del actual sistema político del Reino Unido), las influencias en el
liberalismo de algunos pensadores y filósofos (como J. Locke, Montesquieu,
Rousseau, Hume…), la teoría del liberalismo económico expuesta por A. Smith en “La
riqueza las naciones” y, con más detalle, las ideas y su puesta en práctica de la
independencia y nuevo sistema político norteamericanos y la Revolución Francesa
(Declaración de Independencia de las Trece Colonias, Declaración de Derechos de
la Revolución Francesa, las diversas constituciones…
La segunda parte está dedicada al
liberalismo revolucionario (1810-1835). El liberalismo se construyó a la
par que sucedían los movimientos revolucionarios que ponían en práctica sus
postulados. El autor analiza con detalle la obra de las Cortes de Cádiz,
especialmente la Constitución de 1812 como símbolo y bandera para los amantes
de un cambio político, la Restauración y su imposibilidad de volver totalmente
a la situación prerrevolucionaria a pesar de ser su gran objetivo, y la
formulación del liberalismo doctrinario y su papel en la revolución de 1830 y
en el gobierno de Luis Felipe de Orleans en Francia.
En la tercera parte se estudia liberalismo
clásico (1835-1871). El autor comienza haciendo un repaso a los sistemas
electorales y a las constituciones de diversos países de Europa en la década de
1830 para, posteriormente, analizar las revoluciones del 48 (“última revolución
liberal y primera democrática”) y los efímeros triunfos del liberalismo
aplastados por la subsiguiente reacción. Explica cómo una serie de autores se
dieron cuenta que el liberalismo doctrinario estaba entrando en una profunda
crisis y se detiene en las aportaciones de algunos de ellos, especialmente J.
Stuart Mill y Alexis de Tocqueville que divulgó en Europa las aspectos
positivos de la democracia en Estados Unidos. El liberalismo, tras varios años
en el poder, hubo de encontrar un reajuste entre la teoría y la práctica e
intentar solucionar sus problemas de representatividad.
La última parte, titulada “¿Final
o eclipse? (1871-…)”, aborda el declive del liberalismo clásico desde los
años finales del s. XIX arrinconado por opciones más avanzadas, analiza la
influencia de algunos pensadores (Lord Acton, Leonard Trelawny, B. Russell, R.
Aron, Isaiah Berlín...) para finalizar con la recuperación del liberalismo que
trata de revisar su doctrina para adecuarla a las nuevas condiciones sociales
(neoliberalismo).
Libro de lectura recomendada; su rigor, claridad y orden expositivo ayudan a
comprender los distintos liberalismos que tanta influencia han tenido y tienen
en la historia política y económica contemporánea.