En 1943, el declive de Mussolini era evidente. En sus poco más de 20 años de mandato había acabado con el Estado liberal, el nuevo orden económico no daba los frutos esperados, el Partido se había convertido en una organización extremadamente burocrática, el gran retroceso de la producción industrial, el recelo cada vez mayor de su alianza con Hitler... y las desastrosas actuaciones de Italia en la Guerra (unidades italianas mal equipadas fueron arrolladas en el frente ruso, derrota en el norte de África, la flota acorralada por los ingleses dentro de los propios puertos...).Muchos italianos querían abandonar la Guerra y buscar una paz con los aliados.
En marzo de 1943, los obreros de Fiat se declararon en huelga. Fue la primera gran protesta obrera en un país del Eje. Siguieron huelgas en otras fábricas de Milán.
Muchos jerarcas fascistas pensaban que había que abandonar a Hitler y firmar una paz por separado con los Aliados, para ello había que prescindir de Mussolini. Comenzó a fraguarse una conspiración contra él alentada por varios jerarcas del Partido, jerraquías eclesiásticas, organizaciones de izquierda... El Rey, de forma precavida, comenzó a participar en el complot poniendo como condición la formación de un gobierno conservador. El desembarco aliado en Sicilia fue el detonante.
El primer acto fue convocar una reunión del Gran Consejo Fascista (julio, 1943), allí Grandi presentó una moción para despojar a Mussolini de sus atributos dictatoriales y devolverlos a los organismos que preveían las leyes (Rey, Corporaciones, Gran Consejo Fascista...). Mussolini no mostró especial interés en defenderse. La moción fue aprobada (19 votos a favor, 1 abstención y 8 en contra). Hay cierto debate entre historiadores sobre las razones de esta actitud de Mussolino en la reunión, el historiador Gentile sostiene que el Duce, enfermo, vio la ocasión para "bajarse del tren de la historia".
El Rey, con de esta cobertura, se decidió a destituir a Mussolini. Víctor Manuel, le pidió la renuncia y Mussolini se la entregó. Parece que solo acertó a preguntar: "Entonces, ¿todo ha terminado?", no esperaba del Rey tal comportamiento. Al salir del palacio fue detenido. Ningún camisa negra movió un dedo para defender a su líder, los principalers líderes fascistas aconsejaron acatar la decisión del Rey.
Badoglio formó un gobierno ultraconservador que sólo sustituía las formas externas del Fascismo (ningún jerarca fascista fue detenido). El nuevo gobierno no dudó en reprimir con fuerza las manifestaciones (Bari, Milán...), sus prohibiciones de derechos superaron, a veces, los de la etapa fascista.
Muchos jerarcas fascistas pensaban que había que abandonar a Hitler y firmar una paz por separado con los Aliados, para ello había que prescindir de Mussolini. Comenzó a fraguarse una conspiración contra él alentada por varios jerarcas del Partido, jerraquías eclesiásticas, organizaciones de izquierda... El Rey, de forma precavida, comenzó a participar en el complot poniendo como condición la formación de un gobierno conservador. El desembarco aliado en Sicilia fue el detonante.
El primer acto fue convocar una reunión del Gran Consejo Fascista (julio, 1943), allí Grandi presentó una moción para despojar a Mussolini de sus atributos dictatoriales y devolverlos a los organismos que preveían las leyes (Rey, Corporaciones, Gran Consejo Fascista...). Mussolini no mostró especial interés en defenderse. La moción fue aprobada (19 votos a favor, 1 abstención y 8 en contra). Hay cierto debate entre historiadores sobre las razones de esta actitud de Mussolino en la reunión, el historiador Gentile sostiene que el Duce, enfermo, vio la ocasión para "bajarse del tren de la historia".
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| Sesión del Gran Consejo Fascista en la que se aprobó la destitución de Mussolini (25.07.1943). Fuente de la imagen: https://www.infobae.com/america/historia-america/2018/07/25/a-75-anos-de-la-caida-de-mussolini-como-fue-la-dramatica-reunion-en-la-que-los-jerarcas-fascistas-traicionaron-al-duce/ |
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| P. Badoglio |
Badoglio formó un gobierno ultraconservador que sólo sustituía las formas externas del Fascismo (ningún jerarca fascista fue detenido). El nuevo gobierno no dudó en reprimir con fuerza las manifestaciones (Bari, Milán...), sus prohibiciones de derechos superaron, a veces, los de la etapa fascista.
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