Poco después de asistir a la ceremonia de por la Paz en Hiroshima, en la conmemoración del 68 aniversario del lanzamiento de la bomba atómica sobre esta ciudad, las autoridades japonesas asistieron a la presentación de un moderno buque de guerra, el mayor de su Fuerza de Autodefensa Marítima. El buque, de nombre Izumo (evoca el de otro buque utilizado en la guerra contra China de los años 30), puede transportar 14 helicópteros y con pocas modificaciones puede convertirse en un portaviones.
Esta presentación, enmarcada en el conflicto que Japón mantiene con China por una serie de islas, no se conjuga muy bien con el espíritu pacifista que recoge la Constitución japonesa aprobada tras la II Guerra Mundial (1947), concretamente con su artículo 9:
"Aspirando sinceramente a una paz internacional basada en la justicia y el orden, el pueblo japonés renuncia para siempre a la guerra como derecho soberano de la nación y a la amenaza o al uso de la fuerza como medio de solución en disputas internacionales. Con el objeto de llevar a cabo el deseo expresado en el párrafo precedente, no se mantendrán en lo sucesivo fuerzas de tierra, mar o aire como tampoco otro potencial bélico..."
¿Es el inicio de un rearme camuflado como autodefensa? ¿Piensa Japón abandonar u obviar el artículo 9 de su constitución?
1 comentario:
Es extraña la historia de la Constitución japonesa: fue más un documento hecho por los estadounidenses que por los nipones, así que no sé qué tanto decir habrán tenido sus líderes en la redacción, ni qué intención real habrán tenido de mantenerla. Es edvidente que un país que venció a otro quiera poner cláusulas para que los perdedores no vuelvan a armarse (pienso, por ejemplo, en Alemania tras la Ia Guerra), pero eso no quiere decir que los derrotados tengan necesariamente un espíritu pacifista en mente (de nuevo, Alemania).
Como suele pasar en política internacional, la coerción termina imponiendo la moral de los pueblos, y eso es cierto tanto para China como para Japón y el resto del mundo actual. De todos modos, ojalá que no escale. Saludos.
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