El encargado de la defensa de la costa francesa era Von Rundstedt, el general en jefe de
las fuerzas alemanas en Francia, Bélgica y Holanda. El encargado de la defensa del sector de Normandía era Rommel para lo que disponía de tropas
mediocres, sin experiencia (nuevos reclutas), heterogéneas y poco equipadas (Grupo de Ejércitos B). El sistema defensivo alemán se conocía como el Muro del Atlántico, un pomposo nombre para una estructura bastante limitada.
Desde el día de su
llegada, Rommel insistió en la necesidad de mejorar defensas ante la
previsible invasión. Comenzó a construir búnkeres con artillería,
campos de minas en la costa y en el mar, postes antiplaneadores, alambradas, obstáculos contra embarcaciones en las playas, radares… Rommel encontró muchas dificultades para llevar adelante la mejora de las defensas. Notó una clara falta de cooperación en las diferentes ramas del ejército (a veces en clara competencia), por ejemplo Goering se negó a prestarle cañones antiaéreos o la Marina solo aportó tres cruceros.
Rommel supervisando las defensas de las playas. Imagen de National Geographic |
Los mandos alemanes sostenían criterios diferentes sobre la estrategia de cara a
la invasión aliada. Von Rundstedt pensaba que la
invasión no podría ser detenida en las playas, así que no quería combatir
en las playas, sino que era partidario de esperar hasta ver hacía
donde se dirigía la invasión y entonces atacar. Rommel pensaba que la única forma de parar la invasión era luchar allí donde los Aliados tomasen tierra porque la
superioridad aliada les impedía mover las tropas por tierra. Estas dos ideas implicaban una diferente disposición de las tropas, para Rommel la reserva de tanques debía situarse cerca de la costa, para Von Rundstedt estos tanques debían estar cerca de París y desde allí desplazarse al lugar más necesitado. Al final, Hitler adoptó una solución de compromiso, entregó tres divisiones a Rommel (solo una llegó a Normandía) y el resto (la mayoría) se quedó en París. Hitler
no quería que alguno de sus generales tuviera demasiado poder, por eso
repartía las responsabilidades solapadas. Esto fue bastante perjudicial.
El 6 de junio de 1944, Rommel no está en Normandía, se había desplazado a Alemania
para celebrar el cumpleaños de su esposa y tratar de entrevistarse con Hitler para explicarle su estrategia respecto a la ubicación de los tanques.
No hay comentarios:
Publicar un comentario