El 31 de enero de 1943, hace 70 años, se rindió el mariscal Erich von Paulus, jefe de las fuerzas alemanas en Stalingrado, al general soviético Vasili Zhukov. No fue la de Stalingrado una de las decenas de batallas importantes de la II Guerra Mundial, sino, acaso, la más decisiva. Hasta entonces, la Wehrmacht nunca antes había sufrido una derrota significativa, ni había capitulado uno de sus mariscales, ni había perdido, como tragado por la tierra, todo un Ejército, el VIº y gran parte del IVº ejército Panzer, dos de sus joyas y, sobre todo, aquella derrota marcó el declive de las armas alemanas y el paulatino predominio de las aliadas.... LEER TODO EL ARTÍCULO
El desastre de Stalingrado se debió, en última instancia, a una serie de errores de Hitler, por ejemplo:
- En el verano de 1942, desvió el IV Ejército Panzer para ayudar a cruzar el Don al ejército de von Kleist. “El IV ejército Panzer (…) podría haber tomado Stalingrado sin lucha a finales de julio, pero fue desviado hacia el sur para ayudarme a cruzar el Don. Yo no necesitaba ayuda. Solo sirvió para congestionar las carreteras que estábamos utilizando. Cuando viró nuevamente hacia elnorte, 15 días después, los rusos habían conseguido reunir en Stalingrado las fuerzas suficientes para frenarlo” (Paul von Kleist)
- Hitler no hizo caso de las advertencias de sus generales sobre la concentración de un elevado número de fuerzas rusas en la zona; es más, tres semanas antes había afirmado que los “los rusos no están en condiciones de montar una ofensiva contra ningún objetivo de gran alcance”. El 23 de noviembre los rusos acabaron de cercar al ejército de F. Paulus, alrededor de 275000 soldados.
- El cerco mostraba debilidad en algunas partes por lo que Hitler debió ordenar a F. Paulus que rompiera el cerco inmediatamente, pero no lo hizo porque creía que Manstein, desde el sur, podría romper el frente, sin embargo el avance de Manstein fue frenado por los rusos.
- Hitler tuvo que haber previsto lo difícil, casi imposible, que sería el prometido abastecimiento por aire de un número tan grande de tropas. Paulus solicitaba 750 toneladas diarias, Goering prometía 550, los responsables de la Lutfwaffe decían que era posible enviar únicamente 350 y, al final, sólo llegaban menos de 100. Comenzó a faltar de todo en el VI Ejército: comida, ropa, gasolina, piezas de repuesto, munición…Muchos soldados murieron de hambre o congelación.
- Hitler se negó a autorizar la retirada de F. Paulus lo que hubiera evitado un desastre de tan grandes magnitudes .“La capitulación es imposible. El sexto ejército cumplirá con su deber histórico en Stalingrado hasta que no quede un solo hombre” Último mensaje de Hitler a F. Paulus.
"No podemos ni tan sólo replegarnos hacia nuestras posiciones, ya
que los hombres caen agotados. Es el cuarto día que no han podido comer nada.
¿Qué puedo responder yo, comandante del ejército, si un soldado viene y me
dice: "Coronel, ¡un bocado de pan, por favor! Ya nos hemos comido los
últimos caballos?" (...) ¿cómo podemos continuar combatiendo con
soldados que no tienen ni tan sólo ropa de invierno?. ¿Quién fue el hombre
que asumió la responsabilidad de declarar que era posible garantizar el
reavituallamiento por aire?".
Declaraciones de Paulus.
La batalla costó más de seiscientos mil muertos: 150.000 alemanes y 480.000 soviéticos. Más de 90.000 soldados alemanes fueron hechos prisioneros, de ellos solamente unos pocos (menos de 5000) sobrevivieron a su cautiverio en campos de concentración.
Por último, el Mundo, ofrece 28 fotografías de la Batalla de Stalingrado:
|