El cuatro de junio de 2009, el presidente Obama era recibido en El Cairo por el presidente agipcio H. Mubarak. Ese mismo día pronunciaba un histórico discurso en la universidad de esta ciudad, en un momento de gran tensión como él mismo reconocía al comienzo del mismo. Tras hacer una introducción sobre las aportaciones del Islam a la cultura universal, señalar las excelentes las relaciones de EE. UU. con el Islam, condenar la violencia y el terrorismo, justificar las actuaciones norteamericanas en Irak y Afganistán , admitir las tradicionales buenas relaciones de EE.UU. con Israel, recordar los sufrimientos del pueblo judío y los del pueblo palestino, Obama centró sus discurso en el conflicto árabe-israelí haciendo algunas observaciones para lograr la paz:
- La única solución es que las aspiraciones de ambas partes sean satisfechas a través de dos Estados, en los que tanto israelíes como palestinos vivan en paz y seguridad.
- Los palestinos deben abandonar la violencia. La resistencia mediante la violencia y el asesinato es indefendible y no lleva al éxito.... No es una señal ni de valor ni de poder disparar cohetes contra niños que duermen, o reventar ancianas en un autobús. Ésa no es la forma de reivindicar la autoridad moral, sino la de perderla.
- Para desempeñar un papel en el cumplimiento de las aspiraciones de los palestinos, y para unificar al pueblo palestino, Hamás debe poner fin a la violencia, reconocer acuerdos anteriores y reconocer el derecho de Israel a existir.
- Los israelíes deben reconocer que del mismo modo que no puede negarse el derecho de Israel a existir, tampoco puede negarse el de Palestina.
- Estados Unidos no aceptará la legitimidad del mantenimiento de los asentamientos israelíes.
- Israel también tiene que estar a la altura de sus obligaciones de garantizar que los palestinos puedan vivir, trabajar y desarrollar su sociedad.
- No podemos imponer la paz. Pero en privado, muchos musulmanes reconocen que Israel no se marchará. Del mismo modo, muchos israelíes reconocen la necesidad de un Estado palestino. Es tiempo de que actuemos sobre la base de lo que todos sabemos que es cierto.
El gobierno israelí, aunque mantuvo las formas diplomáticas en su respuesta al discurso en un comunicado en el que se hacía hincapié en la parte que hablaba del reconocimiento del Estado de Israel por los árabes
"El gobierno de Israel expresa su esperanza de que el importante discurso pronunciado en El Cairo lleve a un periodo nuevo de reconciliación entre el mundo árabe-musulmán e Israel. Compartimos la esperanza del presidente Obama de que los esfuerzos de Estados Unidos anuncien el principio de una nueva era que traiga el fin del conflicto y que conduzca al reconocimiento por parte árabe de Israel como el hogar nacional del pueblo judío, viviendo en paz y seguridad en oriente próximo" Comunicado del Gobierno Israelí.
Para Israel, el mensaje global del discurso fue decepcionante.
Sin embargo, en general, fue bien acogido en el mundo árabe, parecía anunciar un cambio en la política de Estados Unidos. Gustó a los árabes las menciones a la creación de un estado palestino y la no aceptación de la legitimidad de los asentamientos judíos. Aunque, para muchos, eran sólo palabras que debían ser refrendadas por los hechos posteriores.
"Nosotros no esperamos que el nuevo presidente norteamericano exprese hostilidad hacia Israel o exija que desmantelen los asentamientos... Él seguirá siendo rehén de los intereses imperialistas norteamericanos, que son equivalentes a los de la ocupación israelí...". Hafez Al-Barghouti, editor del diario de la Autoridad Palestina Al-Hayat Al-Jadida
No se equivocaban los escépticos, pronto Obama iba a volver a la posición política norteamericana tradicional:
http://internacional.elpais.com/internacional/2013/03/20/actualidad/1363778485_352845.html |
“Apoyamos a Israel porque es algo que nos hace más fuertes y más prósperos a ambos, y hace del mundo un lugar mejor. Pero eso EE UU fue una de las primeras naciones en reconocer el Estado de Israel hace 65 años y por eso hoy la estrella de David y las barras y estrellas ondean juntas, y por eso estoy convencido de que nuestra alianza es eterna, para siempre”.